La Mascarada: no debes revelar tu naturaleza a los ajenos a la sangre si lo haces significa renunciar a los derechos de la sangre en dado caso debes mentir a terceras personas sobre tu naturaleza, a las personas que descubran o sepan de tu origen deberás acabar con su vida en unos años por seguridad propia.
El Dominio: tus territorios están bajo tu régimen todos le deben respeto mientras estén adentro nadie puede desafiarlo.
La Progenie: solo podrás engendrar descendencia con el permiso de los mayores de lo contrario, progenitor y descendencia serán destruidos brutalmente.
La Tutela: quienes engendraste son como tus propios hijos, hasta que la Progenie sea liberada debes comandarla en todos los aspectos ellos deben su total obediencia y lealtad y sus servicios serán producto de los tuyos.
Hospitalidad: debes honrar el demonio de otro cuando visites otra ciudad, debes presentarte a quien rija este demonio, sin una palabra de aceptación no serás más que un paria en ese territorio.
Destrucción: está prohibido destruir a otro de tu especie ese derecho le corresponde exclusivamente a los mayores y solo ellos pueden ordenar una cacería de sangre.
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